Halloween es una época del año que mucha gente espera con impaciencia. Los niños planean con ilusión sus disfraces y las familias se preparan para la tradición anual de "truco o trato". Sin embargo, para los niños con trastornos del procesamiento sensorial, Halloween puede ser una experiencia difícil y abrumadora. 

Los ruidos fuertes, las luces brillantes y las multitudes pueden provocar ansiedad y sobrecarga sensorial. Por suerte, hay muchas medidas que puedes tomar para que el truco o trato sea una experiencia más inclusiva para tu familia e incluso para tu comunidad. 

Aquí tienes algunas cosas que puedes hacer en tu casa:

• Cambialos caramelos tradicionales por golosinas no comestibles, como pegatinas, burbujas o juguetes pequeños. Utiliza señales visuales, como una calabaza verde azulado o un cartel, para indicar que hay golosinas no comestibles disponibles.
• ‍Simplifica la entrega de regalos. Coloca unas mantas de picnic en el jardín e invita a los niños a que se salten el timbre y salgan a la hierba a recibirte. Después, ¡deja que elijan su golosina!
• ‍Noesperes que los niños digan "truco o trato". Puede que algunos no hablen, mientras que a otros les resulten especialmente difíciles las interacciones sociales. 
• ‍Creauna zona sensorial para los niños que necesiten descansar del ruido y la agitación. Las tiendas desplegables son una forma excelente de bloquear los estímulos visuales.

Y, si quieres ir más allá, aquí tienes algunas formas de asociarte con tus vecinos: 

• Póngase en contacto con otros padres con antelación para hablar de los posibles desencadenantes sensoriales del vecindario. 
• Anime a los vecinos a proporcionar golosinas no comestibles para dar cabida a los niños con restricciones dietéticas.
• Proporcione un mapa de las casas participantes con opciones adaptadas a las necesidades sensoriales para ayudar a las familias a planificar su ruta.
• Considere la posibilidad de fijar una hora tranquila para el truco o trato con el fin de ayudar a los niños que puedan sentirse abrumados por las multitudes.

¿En resumidas cuentas? Cuantas más personas se sientan seguras y cómodas pidiendo dulces, más se divertirán TODOS. Sé un vecino respetuoso con los sentidos, ¡incluso si en tu casa no hay niños con problemas sensoriales! Los vecinos respetuosos con los sentidos son aquellos que han hecho un esfuerzo consciente por crear un entorno cómodo para TODOS los niños, independientemente de sus necesidades sensoriales.  

Cuando se predica con el ejemplo y se fomenta la empatía y la comprensión entre los vecinos para apoyar a los niños con distintas necesidades durante la temporada de Halloween, ¡todos salimos ganando! 

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